La Celebración del 40-Aniversario de la Fundación Juan Pablo II

Durante estos momentos litúrgicos de San Juan Pablo II, recordemos que tres años después de Su elección a la Capital de San Pedro, el 16 de octubre de 1981, Juan Pablo II organizó a la Fundación que lleva Su nombre.

En septiembre del corriente año, se celebró en Roma el 40 aniversario de esta organización eclesiástica, con sede en el Vaticano, la que promueve iniciativas educacionales, científicas, culturales, religiosas, y caritativas relacionadas con el Pontificado del Papa Polaco. La Fundación también promueve a la gran herencia de Juan Pablo II– desde el Centro de Documentación y Estudios, localizado en la Casa Polaca en Roma, en la calle Cassia 1200. Allí se encuentran los documentos pertenecientes a Su Pontificado, como también una biblioteca que posee más de 30.000 libros. En la Casa Polaca se halla también un Museo, en el que están los obsequios dados al Papa durante Su vida—más de 10.000 objetos.

Juan Pablo II deseó que la Fundación se encargue del desarrollo espiritual y académico de la juventud intelectual de Europa Central y del Este Europeo. Por ese motivo, desde el año 1990, la Fundación conduce un programa de becas para los jóvenes de los países del viejo Bloc Europeo (comunista), facilitándoles estudios en los institutos católicos educacionales en Polonia: En la Universidad Católica de Lublin, a donde se halla la Casa de la Fundación para los estudiantes; y también en la Universidad Papal de Juan Pablo II en Cracovia. Hasta ahora, más de mil becados han terminado sus estudios en estas dos instituciones.

Las actividades de la Fundación son dirigidas y conducidas por el Concejo Administrativo, regido por un director. Al principio el director fue el Cardenal Wladyslaw Rubin, luego el Arzobispo Szczepan Wesoly, y el Cardenal Stanislaw Rylko. Actualmente lo es el Cardenal Prelado Pawel Ptasznik, el Rector de la Iglesia Polaca de San Estanislao en Roma y Pastor de la colonia polaca en Roma.

El Secretario Administrativo de la Fundación es el Dr. o. Krzysztof Wieliczko OSPPE, ayudado por Anna Kielech. Las actividades de la Fundación son posibles debido a la generosidad de los benefactores de todo el mundo. Uno de sus objetivos más importantes es el de preservar a la herencia del Pontificado de Juan Pablo II. Los Círculos de Amigos de la Fundación—que actualmente se hallan en 18 países, y cuentan 49 sedes—son vitales en esa función.

Conversación de Wlodzimierz Redzioch con el Padre Prelado Pawel Ptasznik, Director de la Fundación Juan Pablo II:

Wlodzimierz Redzioch: Durante los días 21-25 de septiembre, se celebraron en Roma las conmemoraciones del 40-Aniversario del establecimiento de la Fundación Juan Pablo II. Porque se celebraron con un retraso de un año?

Padre Prelado Pawel Ptasznik: Debido a la pandemia, fue imposible que llegaran a Roma los miembros de los Círculos de Amigos de la Fundación, los que actúan en todo el mundo.

R.— Cual fue el programa de las celebraciones?

P.— El programa fue muy bien preparado. El primer día (21 de septiembre), los participantes atendieron a una Audiencia General con el Papa Francisco. El 23 de septiembre, en la Universidad Urbaniana de Roma, hubo un Simposio: “Como Transmitir a la Herencia del Pontificado de JP II a las Siguientes Generaciones. La Fundación de Juan Pablo II Frente a Nuevos Desafíos”.

Tomaron parte en el Simposio: el Embajador de la Republica de Polonia en la Sede Apostólica, Adam Kwiatkowski, quien leyó una carta del presidente Andrzej Duda a los participantes del Simposio; el Arzobispo Marek Jedraszewski; el Padre Prelado Stefan Wylezek; el Padre Prelado Slawomir Oder; y el Padre Andrzej Dobrzynski.

El invitado especial del Simposio fue el Jefe de la Fundación del Cardenal Ratzinger-Benedicto XVI, o. Federico Lombardi. Estuvo también presente la Profesora Stefania Falasca, Vice-Directora de la Fundación, quien postuló durante la beatificación de Juan Pablo I. Asimismo asistió la Embajadora de la Republica de Polonia en Roma, Anna Maria Anders. El Cardenal Pietro Parolin (Director de la Fundación de Juan Pablo I) no pudo asistir al Simposio.

Durante la segunda parte del Simposio, hubo una discusión con un panel, en el cual hablaron el Arzobispo Jozef Staniewski, el Metropolita Minsko-Mohylewski, el Fraile Michal Paluch OP de la Universidad Santo Tomas “Angelicum”, y Wojciech Halarewicz de Mazda Europa (miembro del Concejo de la Fundación JP II). El moderador fue el Redactor Michal Klosowski.

El Simposio en la Universidad Urbaniana sirvió no solamente para recapitular a la historia de la Fundación, pero también para reflexionar sobre las nuevas maneras de proclamar a la herencia de Juan Pablo II, y sobre las perspectivas de su mayor desarrollo en el futuro. El Cardenal Estanislao Dziwisz resumió en su discurso a los objetivos del Simposio.

R.— En el programa también se habló sobre futuras peregrinaciones, y Santas Misas…

P.— Si. A estas celebraciones de la Fundación llegaron más de 400 personas de todo el mundo, quienes mostraron interés en que este tipo de celebraciones tenga un carácter espiritual y de peregrinaje. Con este motivo fueron organizados viajes al Santuario de Maria “Ad Rupes” en el Castel Sant’Elia, y al Santuario de Santa Rita en Cascia. También fueron organizadas dos Santas Misas. Una al lado de la tumba de San Juan Pablo II—la que yo presidí (el 22 de septiembre), y otra en la Basílica de San Juan, en Laterano—la que presidio el Cardenal Dziwisz (el domingo, 25 de septiembre).

El sábado en la noche, 24 de septiembre, en la Basílica de San Pancracio, se realizó un concierto titulado “Música Para la Gloria de Dios”, en el que participó la Orquesta Cameral Romana, y el Coro de la Archi-Catedral de Varsovia, bajo la dirección de Teresa Krasowska, y con los solistas Ewa Biegas y el Fraile Rafal Kobylinski SJ.

Los Miembros del Concejo Administrativo, y los Directores del Círculo de Amigos de la Fundación de diversos países, se encontraron con el Embajador de la Republica de Polonia en la Embajada, situada junto a la Sede Apostólica.

R.— Seguramente estas celebraciones (de cinco días) del 40-Aniversario de la Fundación Juan Pablo II, exigieron un gran esfuerzo organizativo…?

P.— Si, es verdad. Como Director de la Fundación, quiero agradecer al Padre o. Krzysztof Wieliczko, Administrador de la Fundación, y al Padre Lukasz Kotarba, Director de la Casa Polaca Juan Pablo II, quienes se encargaron con suma diligencia de la logística y transportación de los invitados. También agradezco al Padre Andrzej Dobrzynski, quien se encargó del Simposio en la Universidad Urbaniana, a las Hermanas del Sagrado Corazón, y a la Sra. Anna Kielich, quienes se encargaron de la organización de dos eventos. Asimismo le agradezco a Ud. y a otros representantes de los “medios”, quienes atendieron a las celebraciones y transmitieron el transcurso del Jubileo.

R.— Para terminar, le quiero preguntar acerca de sus planes para el futuro, que seguramente han discutido durante las sesiones de los miembros del Concejo. Que nuevas formas de actividad piensan introducir?

P.— Creo que con el transcurso de los años, cada vez se hace más necesario acordarnos de las obras y de las enseñanzas de San Juan Pablo II. Por eso la Fundación—sin resignar de los programas de becas y de la ayuda a los peregrinos a la Ciudad Eterna—tiene como objetivo primordial el desarrollo del Centro de Documentación y Estudios del Pontificado de San Juan Pablo II. Quisiéramos que una población numerosa pueda tener acceso a las completas colecciones del Centro. Creo que debemos tener más comunicación y colaboración con los centros universitarios en Roma y en el mundo. También quisiéramos tener más uso de los “medios” públicos y sociales. Quizás se pueda también promover, con un nuevo ímpetu, a la cultura cristiana, lo que tanto deseó Juan Pablo II. Todas estas reflexiones, que fueron iniciadas y discutidas a fondo durante el Simposio, pueda ser que abran nuevas puertas a las obras de la Fundación!

*   *   *

Las celebraciones del aniversario terminaron el domingo, 25 de septiembre, en el local de la Curia General de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, en la calle Aurelia. Durante la cena fue entregado al Cardenal Rylko—por su arduo trabajo para la Fundación—un tríptico, representando a la Virgen Maria de Czestochowa, a Santa Faustina, y a San Juan Pablo II.

Para terminar la ceremonia fue traída una “torta de cumpleaños”, llegada desde Wadowice (Polonia). El primer pedazo, simbólico, lo cortó el cardenal Dziwisz.

Foto: Wlodzimierz Redzioch

(traducido del polaco por Eduvigia Orzechowska-Ancaya)