El día que el Papa Wojtyla proclamó beatos a Juan XXIII y Pius IX, notó que la santidad se realiza en la historia, y por eso cada santo depende de “limites” y de “acondicionamientos” típicos a la humanidad de esos tiempos. Ahora, la misma regla se refiere a Él, Juan Pablo II, y parece que alguien se dio cuenta de eso durante el proceso de Su canonización.
Esta es precisamente la enseñanza que Karol Wojtyla nos transmitió a través de Su ejemplo. Nos dijo que las limitaciones humanas no son las limitaciones de la bondad de Dios, ni de Su misericordia: Dios ofrece a toda Su creación una mano libre para realizar Su obra de la salvación. También nos ofrece la santidad como “una alta medida de la vida cristiana”. Definiendo así a la santidad, inconscientemente Karol Wojtyla definió a Su propia vida.
Con el permiso del Padre Cardenal Estanislao Dziwisz—“Al lado del Santo”
Publicación San Estanislao BM Cracovia 2013