En la mañana del 25 de octubre 2021, en la Casa Polaca en Roma (Dom Polski), llegó de visita el Padre Obispo Gianrico Ruzza, obispo titular de Civitavecchia-Tarquinia. El Padre Obispo fue bienvenido con el tradicional gesto polaco de pan y sal, por los trabajadores laicos, por las hermanas del Sagrado Corazón, y por los Hermanos del Sagrado Corazón—todos ellos empleados en la Casa Polaca. Luego de un discurso de bienvenida dado por el Padre Director de La Casa Polaca Lukasz Kotarba, todos se dirigieron a la Capilla de la Casa. Allí celebró la Santa Misa el Padre Obispo, con la concelebración del Padre Lukasz Kotarba, del Padre Krzysztof Wieliczko Administrador de la Fundación Juan Pablo II, y del Padre Teniente Sebastián Sledziona (del Ordinarito de Campo de WP).
Durante el sermón, el Padre Obispo nos contó de un encuentro que tuvo como joven con Juan Pablo II que había influido en las elecciones de su futura vida. Que había sido muy impresionado entonces por la franqueza de Su corazón y de Su mente. Y que esos elementos de Su esencia Le permitieron a Juan Pablo II cumplir Su servicio en la Capital Apostólica influyendo no solo al crecimiento de la Iglesia, pero también al destino del mundo.
Esta ha sido la primera visita oficial del Padre Obispo Gianrico Ruzza a la Casa Polaca en la Vía Cassia 1200, Roma, y como nos prometió el Obispo: “no ha sido la última”.
